Las puertas, exteriores o interiores, son elementos que aportan seguridad, belleza y estilo a los diferentes ambientes en los cuales son instaladas, por su elaboración en distintos materiales aportan durabilidad y resistencia a las condiciones a las que son sometidas, en las siguientes línea obtendrá prácticos consejos, algunos trucos y el mantenimiento adecuado para cada caso.
Cuidados para todo tipo de puertas
Según el uso que se le dará a la puerta será el material a emplear en su elaboración, ésta puede ser de madera, hierro, aluminio o vidrio.
Cada uno de estos materiales tiene características distintas por lo que su cuidado es variado, toda puerta existe un conjunto de herrajes para el montaje y sistema de cierre.
Puerta de Madera
Lo más recomendable es desmontar periódicamente la puerta para corregir cualquier imperfección que pueda tener, si existe alguna grieta, debe ser rellenada con algún material resistente al agua. Luego, cuando esté completamente seca es necesario aplicar varias capas de barniz o pintura, debe esperar el secado después de cada capa.
Puerta de metal
En todos los casos lo primordial es el mantenimiento regular, lo más aconsejable es que, por lo menos cada seis meses, se desmonte la puerta para su cuidado, si nota arañazos u oxidación se procede a lijar la parte afectada y se procede a pintar, la aplicación de la pintura debe ser por capas y esperar el tiempo necesario de secado para cada capa. En caso de que la corrosión haya afectado más profundamente, la recomendación es contratar a un herrero para la reparación.
Puerta de vidrio
Son variados los trucos para la limpieza de este material, el uso de productos como el bicarbonato, aceite para bebé o de limón son algunos de ellos. El vidrio no permite reparación, sólo la sustitución en caso de rotura, y para ello es necesario remover los herrajes de instalación, retirarla para separar el marco para cambiar el vidrio. En caso de tener un marco de aluminio hay que desarmar el marco, por lo que la recomendación es que lo realice un cerrajero Castelldefels profesional.
Mantenimiento, primera defensa
El mantenimiento diario de las puertas es una labor bastante sencilla, pero no se debe olvidar que todas las puertas poseen elementos de montaje y sistemas de cierre los cuales también deben recibir un mantenimiento preventivo y una revisión frecuente a fin de detectar cualquier posible desgaste o mal funcionamiento de las piezas que lo componen, si es necesario se debe contratar un cerrajero para la revisión o sustitución.
Lo primero es quitar el polvo de la puerta con un paño suave incluyendo la parte superior e inferior así como el marco. Si la puerta es de madera y está barnizada se debe usar un paño suave humedecido con jabón a base de aceite, la limpieza debe realizarse en el sentido de las vetas de la madera, para finalizar el trabajo se utiliza un paño seco y limpio para eliminar cualquier residuo de jabón.
En el caso de las puertas de vidrio, además de seguir los pasos anteriores, se puede aplicar la solución jabonosa con un rociador, dejar reposar unos minutos, enjuagar con abundante agua para finalmente secar con un paño limpio y seco.